jueves, 20 de febrero de 2025

El nacimiento de Cristo fue en el momento oportuno

 


El nacimiento de Cristo fue en el momento oportuno

“Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley, para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos. Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: ¡Abba, Padre! Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo.” Gálatas 4:4-7

El apóstol Pablo al convertirse en testigo del amor de Cristo, pudo entender por inspiración del Espíritu Santo, que Jesús llegó en el momento preciso, por eso escribe en su carta a la Iglesia de Galacia que Dios envió a su Hijo, cuando llegó el cumplimiento del tiempo, con la finalidad de salvar a los que creyesen en Él y con el propósito de adoptarlos como sus hijos (Gálatas 4:4-7).

Es maravilloso saber que como creyentes Dios no solo nos salvó sino que nos adoptó como sus hijos y además nos dio su Santo Espíritu el cual desde nuestro interior clama ¡Abba, Padre! Y esta expresión conlleva un significado de cercanía, de confianza, de intimidad, es similar a cuando de niños le decíamos a nuestro padre: papito, y es importante saber esto porque ahora que por la fe en Jesucristo hemos sido adoptados como hijos de Dios, podemos tener esa confianza para acercarnos a Él y decirle Papito ayúdame, creyendo lo escrito en Hebreos 4:16 “Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.”

El nacimiento de Cristo se dio en el momento oportuno, como dice Gálatas 4:4, de igual manera podemos tener la certeza que Dios nos enviará su ayuda también en el momento oportuno, pues así como en el Getsemaní el Padre envió un ángel para fortalecer a Jesús (Lucas 22:43), para que pudiera cumplir su propósito, igualmente Dios nos fortalecerá con su Santo Espíritu para alcanzar el propósito por el cual nos creó, como dice Efesios 3:16 “para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu;”

Hermanos ahora como hijos de Dios cultivemos esa relación de intimidad que nos permita acercarnos todos los días a su presencia para hallar gracia para alcanzar nuestro propósito.   Oración.

«Padre amado, gracias por adoptarme como tu hijo, hoy me acerco al trono de tu gracia pidiendo tu ayuda para alcanzar el propósito por el cual tú me creaste, permíteme por la comunión con tu Santo Espíritu ser fortalecido en mi hombre interior. Amén.