Camuflaje vs. Luz y Verdad
“Tenía el rey de Siria guerra contra Israel,… Entonces envió
el rey allá gente de a caballo, y carros, y un gran ejército, los cuales
vinieron de noche, y sitiaron la ciudad.” 2 Reyes 6:8a, 14
Cansar a la presa, dividirla o esparcirla de la manada y
rodearla no sólo son las estrategias que utiliza el enemigo para intentar
devorarla, pues antes de que todo ésto se lleve a cabo debe haber un
acercamiento, y dicho acercamiento sólo se puede lograr a través del camuflaje.
La Real Academia de la Lengua Española lo define como: “Disimular dando a algo
el aspecto de otra cosa.”, y si de camuflaje se trata, el enemigo: la carne, el
mundo y Satanás, sí que saben hacerlo. La Biblia nos lo revela, y desde el
inicio de la creación podemos ver a Satanás usando su primer camuflaje, su
disfraz de serpiente, con la intención de poder estar más cerca de su presa,
Eva (Génesis 3:1). Pero Satanás no es el único que se camufla, nuestra carne
también lo hace, ¿cómo? con pensamientos que parecen “buenos”, decisiones que
parecen ser “espirituales”, emociones, o un sentir que llamamos, y decimos que
“proviene de Dios” (Jeremías 17:9). Y ¿cómo no mencionar al mundo, con sus
ideologías camufladas, que parecen “buenas, lógicas y que no le hacen daño a
nadie” sino que, como dicen ellos, están ahí para “liberarnos” de una
esclavitud o dictadura en la que se nos tiene? (Isaías 5:20-21). Como vemos el
camuflaje es tan sólo la manera en la que nuestro enemigo se acerca a nosotros
para poder entonces aplicar todas esas estrategias que a lo largo de estos
últimos devocionales hemos visto. La pregunta es: ¿Cómo podemos identificar que
un pensamiento, una decisión, una ideología, entre otras, están siendo
camufladas? La respuesta es clara, llevarlas a la luz y Verdad de la Palabra.
Miremos que el ejército Sirio decidió acercarse al pueblo de
Israel, no en plena luz del día sino que decidieron camuflarse en la noche,
pues así sería más fácil tomar al pueblo de Israel por sorpresa, totalmente
desprevenidos, dejándolos así sin una oportunidad de reaccionar a tiempo, y lo
mismo hace el enemigo con nosotros, pues no sólo se camufla sino que también
nos toma por sorpresa, por eso la necesidad de estar atentos a las artimañas
del enemigo, de filtrar todo bajo la Palabra de Dios, que es como esa luz que
revela lo que hay en la oscuridad (Salmos 119:105)
Hermanos, el Señor nos está dando a conocer todas la
estrategias que usa el enemigo pues estamos en tiempos difíciles y vendrán días
peores, pues muchos apostatarán de la fe, se apartarán, como lo dice 1 Timoteo
4:1 y 2 Timoteo 4:3-4, se volverán a las fábulas, escucharán y creerán en las
mentiras del enemigo, no identificarán el camuflaje que usa, pues no se
prepararon como deberían para poder defender esos muros de protección que Dios
ya había levantado en su mente y que son conforme a Su Voluntad. Que ésto no
nos pase a nosotros, sigamos el consejo que nos está dando el Señor y
preparémonos, pues el ladrón, el devorador está buscando a quien devorar: “Pero
sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de
venir, velaría, y no dejaría minar su casa.” (Mateo 24:43). Oración.
«Padre, me estás entrenando para estar enteramente preparada,
para contrarrestar con la luz de tu Palabra, todas esas mentiras que el enemigo
camufla y que usa en mi contra para hacerme intentar caer y derribar aquellos
muros de protección que has levantado en mi mente y que son conforme a Tu
buena, perfecta y agradable Voluntad. Ayúdame Espíritu Santo de Dios, guíame y
recuérdame en todo momento la Palabra del Señor, fortaléceme y no permitas que
perezca. Te lo pido en el Nombre de Jesús. Amén.