sábado, 28 de diciembre de 2019

Quiero permanecer firme y constante


Quiero permanecer firme y constante
«Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano”, 1 Corintios 15:58
Pablo escribe esta carta a la iglesia situada en la ciudad de Corinto, un puerto famoso por su decadencia, corrupción y prostíbulos, que servían a los marineros que llegaban ahí. Sabemos que la iglesia de Corinto era problemática, pues los creyentes estaban divididos luchando unos contra otros por tomar la dirección de la congregación, iban a los prostíbulos con regularidad, llevaban una vida sexual desordenada, entablaban demandas legales entre ellos en los tribunales paganos. Por lo tanto, Pablo llama a los corintios a afirmarse, precisamente porque eran débiles en la fe y a crecer en la obra de Cristo.
Ahora bien, para alcanzar un crecimiento espiritual hay que tomar la firme decisión de caminar en integridad, sin la cual no se alcanza la madurez espiritual, ni se recibe el bien. La Biblia nos dice: “Porque sol y escudo es Jehová Dios; gracia y gloria dará Jehová. No quitará el bien a los que andan en integridad” (Salmo 84:11). Tal vez hoy la integridad no parezca importante, pero la falta de ella traerá consecuencias amargas. Ser íntegro, significa que nuestras acciones concuerdan con nuestras palabras y nuestro comportamiento refleja lo que realmente somos. Hemos sido llamados a caminar en integridad. David dijo: “Guarda mi alma, y líbrame; no sea yo avergonzado, porque en ti confié. Integridad y rectitud me guarden, porque en ti he esperado”. (Salmo 25:20-21)
Hermano, la Biblia nos habla de forma personal y profunda, como si estuviéramos en batalla, nos pide que estemos firmes e inquebrantables, sabiendo que todo lo que hacemos por la obra, es tomado en cuenta por el Señor, pues el trabajo con el Señor no es en vano. Oración.
Amado Señor, me has llamado a estar firme e inconmovible, a crecer constantemente en la fe de Jesucristo, y esto requiere de integridad, y por ello te ruego me ayudes en mis debilidades; ya no quiero ser igual, quiero renovarme para glorificarte y adorarte con un nuevo corazón. Te amo Señor, amén.  Difundiendo el mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la tierra! Usa tus redes sociales para ese propósito.