jueves, 13 de agosto de 2020

 

Dios renueva mis fuerzas

“Pero los que esperan en el SEÑOR renovarán sus fuerzas; levantarán las alas como águilas. Correrán y no se cansarán; caminarán y no se fatigarán.”, Isaías 40:31

“El que sacia de bien tu boca de modo que te rejuvenezcas como el águila.”, Salmos 103:5

Esperar en el Señor significa confiar en Él, en su provisión, intervención y protección. En este pasaje, se utiliza la Palabra hebrea “kóakj” y se refiere a la capacidad de hacer algo, al vigor que nos da Dios, no para huir de las dificultades, sino para enfrentarlas con valentía, con la fuerza y capacidad que Él puede darnos, si confiamos en su intervención.

Si confío en el Señor, Él me da nuevas fuerzas, si confío en mis propias fuerzas o capacidades, estas se desgastan o se acaban, o son insuficientes, están por debajo de la dificultad. Pero la fuerza del Dios poderoso, está por encima de cualquier mal, problema o circunstancia, porque por naturaleza la fuerza de Dios es ilimitada. Por esto, cuando confiamos en Dios, la fuerza que Él nos suministra se compara con un águila que toma vuelo, donde las circunstancias complicadas se miran desde la perspectiva correcta, desde la perspectiva celestial.

Si confiar en Dios, me da nuevas fuerzas para enfrentar cualquier dificultad y me da la visión correcta para que estas no estén por encima de mi, sino por debajo, entonces, “Por lo demás, hermanos míos, fortaleceos en el Señor, y en el poder de su fuerza.” (Efesios 6:10), ya sea en abundancia o escasez podemos declarar que “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” (Filipenses 4:13)   Oración.

«Padre, tú me elevas como el águila, los problemas no me ahogan cuando confío en ti, sino que toda obra para mi bien y bendición, tu intervención mi Señor es lo que necesito en mi vida, renueva mi fuerza y mi entendimiento. Amén.    Difundiendo el mensaje de Jesucristo.

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