lunes, 9 de agosto de 2021

¿Dónde está Dios?

 


¿Dónde está Dios?

“Y tomando el manto de Elías que se le había caído, golpeó las aguas, y dijo: ¿Dónde está Jehová, el Dios de Elías? Y así que hubo golpeado del mismo modo las aguas, se apartaron a uno y a otro lado, y pasó Eliseo. Viéndole los hijos de los profetas que estaban en Jericó al otro lado, dijeron: El espíritu de Elías reposó sobre Eliseo. Y vinieron a recibirle, y se postraron delante de él.” 2 Reyes 2:14-15

A veces en nuestra vida espiritual muchos nos hacemos la misma pregunta que se hizo Eliseo: “¿dónde está el Dios de Elías?” La respuesta para los creyentes es que Dios está más cerca de lo que imaginamos, está en nuestro corazón, cuando hemos conocido su amor, lo hemos aceptado como nuestro Señor y Salvador y su Santo Espíritu ha venido a morar dentro de nosotros, toda la plenitud de la deidad habita en nuestra vida.

Si toda su deidad y poder reposan dentro de nosotros, deberíamos experimentar constantemente su Presencia, para eso debemos rendir todo nuestro ser y pedirle que tome el control y así como recibimos a Cristo, debemos pedir la llenura del Espíritu Santo, por fe, todos los días. Esta debe ser la condición habitual de todo creyente: “ser llenos del Espíritu Santo”. Como dice Efesios 3:19-20 “y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios. Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros”.

Cuando Eliseo fue lleno del Espíritu Santo pudo hacer lo mismo que hacía Elías, por eso los hombres que lo estaban observando reconocieron el mismo poder y quisieron postrarse ante él, ¡qué ignorancia!, no es ante nosotros que se tienen que rendir las personas, sino ante la Presencia y el gran poder de Dios. Permitamos que el Espíritu Santo intervenga y tome el control de nuestras vidas para que ya no seamos los mismos y también otros reconozcan a Dios a través de nosotros.

Cuando entendemos el papel del Espíritu Santo en la vida del creyente, podemos apropiarnos de su plenitud para vivir de una manera santa, recta, y para ser usados como Él quiere, glorificando a Cristo cada día.

Dios está presente en este mundo a través de los creyentes llenos del Espíritu Santo, para que influencien con su gloria la vida de otros. La clave es permitir que Dios viva esa vida sobrenatural a través de nosotros, dejándonos guiar, transformar y purificar interiormente por su Presencia. Tenemos el mismo Dios de Eliseo y Elías que obra poderosamente para cambiar todo lo que nos rodea. Nuestro desafío es entonces estar siempre llenos del Espíritu Santo como dice Efesios 5:18 “No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu”.    Oración.

«Gracias amado Dios por enviar a tu Espíritu Santo a morar en mi vida, quiero apropiarme de la plenitud de su Presencia para vivir con poder e influenciar mi entorno. Espíritu Santo, guíame, ilumíname, lléname, úngeme para ser un instrumento en este mundo que tanto necesita de Dios. Ayúdame a vivir sobrenaturalmente glorificando a Cristo a través de tu Presencia, manifiéstate en todo lo que haga y diga, para que otros rindan su vida a Jesús. Amén

En la medida en que nos llenemos de Él, mostraremos a ese Dios vivo que mora en nosotros actuando con poder en este mundo necesitado.  Difundiendo el mensaje de Jesucristo.

¡Hasta lo último de la tierra! Usa tus redes sociales para ese propósito.