sábado, 17 de octubre de 2015

Sal 58:1-11

Sal 58:1-11


58.1 El Antiguo Testamento está lleno de referencias acerca de la justicia y es un tema clave en los salmos. Es lamentable, pero muchos jueces y gobernantes en épocas antiguas tomaron la justicia en sus propias manos. Tenían completa autoridad sin responsabilidad alguna y poder para hacer sus leyes. Cuando los jueces terrenales son corruptos, hay muy poca esperanza de justicia en esta vida. Pero Dios ama la justicia y los que lo obedecen verán la justicia perfecta en la eternidad.

58.11 Entre todas las personas, nuestros líderes nacionales deben ser justos y rectos. Cuando son injustos y corruptos, el pueblo sufre. Los ricos se enriquecen, los pobres se empobrecen más, los políticos arrebatan con violencia el poder de la gente, la nación se deteriora moralmente y se olvida a Dios. Cuando al fin el bien triunfa, "se alegrará el justo" (58.10). Tenga la seguridad de que habrá un día en que se rendirán cuentas y Dios juzgará con justicia. Cuídese para que nunca esté del lado de la injusticia, no sea que se encuentre parado ante un juez justo que guzgara a vivos y muertos y su nombre es Jesucristo Rey de Reyes y Señor de Señores.