sábado, 27 de octubre de 2018

Hechos 1:2


Hechos 1:2 y hasta el día en que subió al cielo. Antes de irse, por medio del Espíritu Santo dio instrucciones a los apóstoles que había escogido respecto a lo que debían hacer.  El libro de Los Hechos nos enseña una continuación del ministerio de Jesús usando la vida de los primeros discípulos. La misión de Jesús continuaba por medio de la iglesia su cuerpo, ¡nosotros somos los seleccionados para llevar a cabo la obra de Jesús aquí en la tierra! Por medio del Espíritu Santo, el cumplimiento de la promesa que nos dio el Señor en Juan 14:16–17, “Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:17 el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.”
Nosotros debemos dejar que el Espíritu Santo nos capacite, y derrame de su unción si vamos a llevar a cabo la misión de la iglesia con efectividad hoy día. Recordemos que fue el Espíritu Santo que ungió a Jesús para el ministerio como nos dice Lucas 4:18., “El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos.” El Espíritu Santo estaba activo en todo lo que Jesús hacía y llevaba a cabo en su misión.
Vemos el importante papel que llevaba a cabo el Espíritu Santo en la vida de Jesús, incluyendo en su concepción (Lucas 1:15, 35, 67), cuando fue dedicado y presentado en el templo (Lucas 2:25–27) y al realizar todas las actividades de su ministerio público (Lucas 4:1, 14, 18; 10:21; 11:13). El Espíritu Santo reposaba sobre el ministerio de Jesús, “Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret, y cómo éste anduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él” (Hechos 10:38). Como resultado de esto, ¡había poder, efectividad y éxito en todo lo que hacían!
Oremos en este dia que nosotros podamos ser los instrumentos que el Espíritu Santo consagre y utilice para llevar a cabo el ministerio que Dios nos ha encomendado. Solo por medio de la obra del Espíritu Santo en nosotros podremos realizar todos los planes que Él tiene para nuestras vidas. Que logremos alinear nuestras vidas y ministerios a su divina voluntad. Que Isaías 11:2 se cumpla en nosotros, “Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder, espíritu de conocimiento y de temor de Jehová” Amen.   Difundiendo el mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la tierra!    Usa tus redes sociales para ese propósito