martes, 3 de marzo de 2015

Hechos 21:20-26

Hechos 21:20-26


Al oírlo, alabaron a Dios.  Luego le dijeron a Pablo: ya ves, hermano, cuántos miles de judíos han creído, y todos ellos siguen aferrados a la ley.  Ahora bien, han oído decir que tú enseñas que se aparten de Moisés todos los judíos que viven entre los gentiles.  Les recomiendas que no circunciden a sus hijos ni vivan según nuestras costumbres.  ¿Qué vamos a hacer?  Sin duda se van a enterar de que has llegado.  Por eso, será mejor que sigas nuestro consejo.  Hay aquí entre nosotros cuatro hombres que tienen que cumplir un voto.  Llévatelos, toma parte en sus ritos de purificación y paga los gastos que corresponden al voto de rasurarse la cabeza.  Así todos sabrán que no son ciertos esos informes acerca de ti, sino que tú también vives en obediencia a la ley.    En cuanto a los creyentes gentiles, ya les hemos comunicado por escrito nuestra decisión de que se abstengan de lo sacrificado a los ídolos, de sangre, de la carne de animales estrangulados y de la inmoralidad sexual.  Al día siguiente Pablo se llevó a los hombres y se purificó con ellos.  Luego entró en el templo para dar aviso de la fecha en que vencería el plazo de la purificación y se haría la ofrenda por cada uno de ellos.


Pablo acaba de contarles los milagros que Dios hizo en sus viajes y cómo los gentiles (no judíos) estaban hambrientos de conocer el evangelio.  Los ancianos escucharon y dieron gloria a Dios pero poco tiempo después informan a Pablo de un problema que no los deja tranquilos.  Pablo: están hablando mal de ti y promoviendo que eres un apóstata.  Tenemos un plan para que esos rumores no sigan.  Esto es lo que debemos hacer...  La biblia no nos explica claramente cuáles eran los rumores además de ser poco probable el hecho de que Pablo estuviera creando confusiones de este tipo.
Independientemente de que los rumores fueran ciertos o no, eso no resulta interesante para reflexionar el día de hoy.  Lo que debemos ver y sobre todo, estar alerta es en el hecho de que los rumores pueden llevarnos a tomar muy malas decisiones.  ¿Cuál es el principal objetivo que tenían los ancianos y discípulos?  ¿Aclarar rumores?  ¿Convencer a la gente?  O ¿Compartir el evangelio de Cristo?  Nuestro deber es llevar la palabra de Dios a las personas.  Ir y haced discípulos nos dice Jehová.  No nos dice ir y preocuparse por lo que los demás digan.  O ir y no dejar que haya rumores y mentiras sobre lo que dicen.  Nos dice que anunciemos su palabra y que hagamos discípulos.  Un discípulo depende de aquél que le enseña y sigue a su líder.  Si un líder está preocupado y entregado a su discípulo, en el momento que se levanta un rumor, éste va y aclara lo que es necesario a la luz de la palabra de Dios.  Un líder no debe ir y armar planes para contraatacar.  Un líder se toma el tiempo de explicar a sus ovejas lo que está ocurriendo.  Un líder se preocupa porque sus ovejas estén protegidas e instruidas en la palabra de Dios.  Piensa en esto: si los ancianos hubieran dedicado su esfuerzo en instruir a los creyentes e informarles del plan de Dios, no habría existido la necesidad de que Pablo hiciera lo que hizo.
En mi opinión, Pablo cometió un error al realizar ese voto y buscar apacentar a los demás.  Sí, es un hecho que había confusión sobre las costumbres que habría que seguir y las que no.  Pero al realizar este voto, ahora los gentiles se confundirían y pensarían que ellos también lo tendrían que hacer.  ¿Te das cuenta?  Todo se originó de rumores.  Ni siquiera se preguntaron quién los comenzó o si tenían fundamento.    Imagina que Pablo les hubiera dicho: muy bien, vayamos con aquellos que dicen esto y aclaremos la situación.  Debemos ser cuidadosos e inteligentes en nuestras acciones.  Debemos permanecer en Cristo y no dejar que lo externo entre en nosotros y nos aparte de nuestro principal objetivo que es servir al Señor.  Antes de actuar y tomar decisiones te recomiendo que ores a Dios y pidas por sabiduría.  Pon a la luz de la palabra tus pensamientos y deseos.  Así podrás darte cuenta cuál será la mejor decisión.
Oración
Señor: perdona mis pecados.  He actuado basado en rumores o incluso en ocasiones yo he creado rumores pues sin estar seguro he hecho comentarios.  Te pido me saques de estos conflictos y permitas que tenga sabiduría para buscarte y servirte y no caer en los revoltijos que ocasionan los rumores.  Abre mi entendimiento y reina sobre mis pensamientos y sobre todo sobre mis palabras.  Te lo pido en el nombre de Jesús.  Amen.