miércoles, 16 de mayo de 2018




 La samaritana y Jesús
Alrededor de todo el mundo, todo ser humano anda en busca de amor, anda necesitado de afecto, de aprecio, quiere ser aceptado por otros, tiene un vacío en el corazón que él quiere que sea llenado, porque lo han llenado con cosas vanas y pasajera que no le han servido de nada (licor, cigarrillos, marihuana, drogas, prostitutas, homosexualismo, ser travesti, etc.) quiero decirte que el único que puede llenar ese espacio vacío en tu corazón y llenarlo de amor verdadero; es Dios.

Juan 4:6 Eran como las doce del día, y Jesús estaba cansado del viaje. Por eso se sentó a la orilla del pozo, 7-8 mientras los discípulos iban al pueblo a comprar comida. En eso, una mujer de Samaria llegó a sacar agua del pozo. Jesús le dijo a la mujer: Dame un poco de agua. 9 Como los judíos no se llevaban bien con los de Samaria,  la mujer le preguntó: ¡Pero si usted es judío! ¿Cómo es que me pide agua a mí, que soy samaritana? Las casualidades no existen, esta mujer que llega al pozo esta falta de amor, su corazón anda buscando pero sigue vacío, esta mujer le contesta a Jesús de esta manera, porque me pide agua a mí, podría ser un rechazo por ser hombre y ella está herida, o por las diferencias entre judíos y samaritanos.

Juan 4:10  Jesús le respondió: Tú no sabes lo que Dios quiere darte, y tampoco sabes quién soy yo. Si lo supieras, tú me pedirías agua, y yo te daría el agua que da vida. 11 La mujer le dijo: Señor, ni siquiera tiene usted con qué sacar agua de este pozo profundo. ¿Cómo va a darme esa agua? Jesús que conoce todos los corazones; ve el de esta mujer necesitada de amor y le dice: tú no sabes la misericordia que Dios quiere hacer hoy contigo, lo que Dios te quiere dar es mucho más grande y mejor que el agua de este pozo, Jesús le habla de limpiar todos sus pecados y de regalarle una nueva vida en Cristo Jesús y llenar su corazón de verdadero amor.

Juan 4:13 Jesús le contestó: Cualquiera que bebe del agua de este pozo vuelve a tener sed, 14 pero el que beba del agua que yo doy nunca más tendrá sed. Porque esa agua es como un manantial del que brota vida eterna. 15 Entonces la mujer le dijo: Señor, deme usted de esa agua, para que yo no vuelva a tener sed, ni tenga que venir aquí a sacarla. Jesús le dijo cualquiera que quiera buscar en este mundo amor, volverá a tener necesidad nuevamente, pero el amor que yo te ofrezco es grande y te llevara a la vida eterna, entonces la mujer le dice: deme de ese amor para que ya no tenga que seguir buscando.

Jua4:16 Jesús le dijo: Ve a llamar a tu esposo y regresa aquí con él. 4:17 No tengo esposo respondió la mujer. Jesús le dijo: Es cierto, 18 porque has tenido cinco, y el hombre con el que ahora vives no es tu esposo. 19 Al oír esto, la mujer le dijo: Señor, me parece que usted es un profeta. 25  La mujer le dijo: Yo sé que va a venir el Mesías, a quien también llamamos el Cristo. Cuando él venga, nos explicará todas las cosas. 26 Jesús le dijo: Yo soy el Mesías. Yo soy, el que habla contigo. Podemos ver el cuadro de una mujer que quería ser feliz, quería amor, quería aprecio, quería ser respetada y ser tratada bien; Jesús quería restaurar su vida y darle el ese amor que ella buscaba, un amor eterno, no pasajero, no mentiroso, no traicionero, es mi forma de pensar: creo que esta mujer era hermosa, pues ya había tenido cinco maridos, ellos se acercaron a ella atraídos por su belleza, pero al igual que el primero, el segundo hasta el quinto en ninguno de ellos; ella encontró el amor que llenar el vacío de su corazón, que satisficiera su necesidad de sentirse amada, por eso ella ya no quería casarse, estaba probando con una relación sin compromisos, sin lazos matrimoniales, pero tampoco le funciono, pero ahora ella experimentaba el amor de Dios a través de Jesucristo y al sentir que ese vacío se llenó, salió corriendo a contárselo a todos.

Juan 4:28 La mujer dejó su cántaro, se fue al pueblo y le dijo a la gente: 29 Vengan a ver a un hombre que sabe todo lo que he hecho en la vida. ¡Podría ser el Mesías! 30 Entonces la gente salió del pueblo y fue a buscar a Jesús. Cuando tu experimentes en carne propia como Dios ha llenado el vacío de tu corazón; serás como esta mujer, correrás y no descansaras de decirle a otros lo que Dios ha hecho contigo, esa es la actitud que Dios quiere de todos nosotros que al recibir la palabra con gozo y alegría vallamos  a compartir con otros el mensaje de amor y salvación de Dios a través de Jesucristo su hijo amado.

Juan 4:39 Mucha gente que vivía en ese pueblo de Samaria creyó en Jesús, porque la mujer les había dicho: Él sabe todo lo que he hecho en la vida. 40 Por eso, cuando la gente del pueblo llegó a donde estaba Jesús, le rogó que se quedara con ellos. Él se quedó allí dos días, 41 y muchas otras personas creyeron al oír lo que él decía. Podemos ver como una mujer falta de amor, al sentir que su corazón es llenado de amor, con gozo va y le dice a todos: tengo un nuevo amor, tengo un nuevo amor, que me da gozo, felicidad, el vacío de mi corazón ha sido llenado por el amor de Jesucristo, el hijo de Dios, y mucha gente que conocía a esta mujer al ver su cambio, su felicidad y su gozo también creyó a Dios y es más creyeron que Dios podía cambiarlos a todos por eso el pueblo vino y le dijo a Jesús quédate con nosotros. Porque como aquella mujer samaritana habían muchos más en el pueblo que también buscaban ese amor, querían que el vacío de su corazón fuera llenado con algo eterno y no con cosas pasajeras (vicios, prostitutas, drogas, homosexualismo, travesti, etc.).



Hoy en día hay miles de personas al rededor del mundo que caminan con un gran vacío en su corazón, quiero decirte: Solo Jesucristo el hijo de Dios lo puede llenar de un amor leal, fiel, justo, santo, puro, sin engaño, no traicionero y un amor tan grande que te llevara  a la vida eterna, no sigas caminando por la calle con ese vacío dentro de ti que te mortifica y mata, no esperas más ven a Jesús de Nazaret y deja que llene tu corazón.

Juan 4:42 La gente le dijo a la mujer: Ahora creemos, no por lo que tú nos dijiste, sino porque nosotros mismos lo hemos oído; y sabemos que en verdad él es el Salvador del mundo. Un pueblo entero fue sanado de su corazón; Dios los lleno de amor, y ellos mismos le dicen a la mujer ya no creemos al verte feliz llena de gozo, ahora creemos porque Jesucristo lleno nuestras vidas de amor, ahora creemos que él es el hijo de Dios, el salvador, porque salvo nuestras vidas de la amargura, el rencor, la falta de perdón, los falsos y mentirosos amores de este mundo. La verdad imagina lo que dice la palabra de Dios: Como los judíos no se llevaban bien con los de Samaria, mira que milagro tan grande, un pueblo necesitado de amor, que fueron rotos sus prejuicios, fueron sanados de verdad sus corazones que no les importo que ellos fueran judíos, lo que ellos anhelaban y necesitaban lo encontraron en Jesús, su corazón fue lleno de amor, gozo, paz y alegría.

No esperes mas ya no sigas buscando en este mundo, perverso y engañosos, ven a Jesús él puede restaurar tu ser interior y llenarte de amor, solo él tiene el poder de poder cambiar el corazón del hombre a través de el mismo.

Tú no estás solo, Dios te ama y está siempre contigo.
Dios te bendiga, y que el amor del Padre, el amor de Jesucristo y la unción de su espíritu Santo este siempre contigo, en el nombre de Jesús, amen.