Su Palabra
“Envió su
palabra, y los sanó, y los libró de su ruina.” Salmos 107:20
¿Imaginas
qué sería de nosotros sin su Palabra?
Esta es una
pregunta que sin duda nos lleva a reflexionar. Podemos pensar en unos cuantos
versículos que hemos memorizado para respaldarla, recordar testimonios de
personas donde la palabra de Dios ha transformado vidas o quizás suspirar al
recordar cómo ha transformado la nuestra.
Y es que la
palabra de Dios es realmente como leíamos ahora, ese poder de Dios para
sanarnos y liberarnos, para salvarnos como nos complementa Romanos 1:16, el
cual dice “Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para
salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego.”
Poder, poder de Dios para salvación, algo extraordinario y en lo que Dios
quiere que reflexionemos el día de hoy.
Nosotros
debemos ser conscientes que tenemos a nuestro alcance y disposición el poder
milagroso de Dios para la salvación de absolutamente todo aquel que lo cree.
Esto debería responsabilizarnos y motivarnos a usarlo tanto como a nuestro
celular, pero tristemente en ocasiones lo tomamos con pereza, como simple
rutina o con poca importancia.
Te invito
para que te animes a escudriñar, vivir y compartir ese gran poder que el Señor
nos ha dejado, piensa en lo afortunado que has sido desde que lo conociste y
corre a compartir tu fortuna inagotable con todo aquel que conozcas, bendícete
y bendícelos.
Y la
pregunta para cerrar ¿Cuántos versículos estamos memorizando de su Palabra?
Motivémonos
a memorizar su Palabra, es una poderosa forma de transformar nuestra manera de
pensar. Oración.
«Padre Dios,
tu palabra es mi deleite, dulce más que miel y deseable más que oro. Te doy
gracias, Señor, por permitirme acceder a ella cada día y por usarla como
instrumento poderoso para revelarme a tu Hijo amado con la dirección de tu
Santo Espíritu. Amén. Difundiendo el
mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo
último de la tierra! Usa tus redes sociales para ese propósito.