lunes, 19 de julio de 2021

Adorar al gran Rey

 


Adorar al gran Rey

“Venid, aclamemos alegremente a Jehová; cantemos con júbilo a la roca de nuestra salvación. Lleguemos ante su presencia con alabanza; aclamémosle con cánticos. Porque Jehová es Dios grande, y Rey grande sobre todos los dioses.” Salmo 95:1-3

¿Quieres realizar un sacrificio agradable para Dios? Alábalo por medio de Jesucristo, confiesa y exalta su nombre (hebreos 13:15); nuestro Dios y Creador se siente honrado cuando lo alabamos (Salmo 50:23). A través de su Palabra Él nos invita a que lo aclamemos con alegría y le cantemos con júbilo. Es de gran regocijo para Dios y para nosotros que lleguemos ante Su presencia con alabanza, que entremos por sus puertas con acción de gracias y bendiciendo su nombre, porque para siempre es su misericordia y su verdad por todas las generaciones (Salmo 100:1-5).

Alabar a Dios es una manera de exaltarlo como Rey grande y digno de suprema alabanza, de agradecer al Señor por su infinita misericordia, por su salvación, su poder y sus maravillas; también es una manera de buscar su rostro y reconocerlo como nuestro Dios y Hacedor, que Él nos hizo y no nosotros a nosotros mismos y de aceptar que somos ovejas de su mano y pueblo de su prado. (Salmo 100:3).

Para alabar a nuestro Dios es necesario que lo hagamos con alegría, cantando salmos a su nombre con instrumentos, alzando nuestras voces, levantando nuestras manos y aplaudiendo para Él (Salmo 98:4-6).

Todo lo que respira debe alabar al Señor, toda su creación está llamada a glorificarlo, el mundo entero incluyendo los mares, los ríos y los montes (Salmo 98:7-9).

Y este es el día que ha hecho el Señor, así que gózate y alégrate en Él, dile: “Mi Dios eres tú, y te alabaré: Dios mío, te exaltaré” (Salmo 118:28).   Oración.

«Padre Santo, en este día te alabo y te reconozco como mi Dios y mi salvador, como el gran Rey y digno de suprema alabanza; mi corazón te alaba, mi boca te canta, mis manos te aplauden y mis instrumentos toco para ti. Bendecido, alabado y glorificado seas tú hoy y siempre, en el nombre de Jesús. Amén.   Difundiendo el mensaje de Jesucristo.

¡Hasta lo último de la tierra! Usa tus redes sociales para ese propósito.