miércoles, 18 de junio de 2025

Compasión y bondad reflejo del Amor de Dios

 


Compasión y bondad reflejo del Amor de Dios

“Y Jesús, llamando a sus discípulos, dijo: Tengo compasión de la gente, porque ya hace tres días que están conmigo, y no tienen qué comer; y enviarlos en ayunas no quiero, no sea que desmayen en el camino. Entonces sus discípulos le dijeron: ¿De dónde tenemos nosotros tantos panes en el desierto, para saciar a una multitud tan grande? Jesús les dijo: ¿Cuántos panes tenéis? Y ellos dijeron: Siete, y unos pocos pececillos. Y mandó a la multitud que se recostase en tierra. Y tomando los siete panes y los peces, dio gracias, los partió y dio a sus discípulos, y los discípulos a la multitud. Y comieron todos, y se saciaron; y recogieron lo que sobró de los pedazos, siete canastas llenas. Y eran los que habían comido, cuatro mil hombres, sin contar las mujeres y los niños” Mateo 15:32-38

Es maravilloso ver cómo una y otra vez la Palabra de Dios nos revela el amor y la bondad de nuestro Salvador; Jesús en el relato bíblico conocido como la alimentación de los cuatro mil, muestra claramente una característica de su gran amor: la compasión. Para el Señor era importante enseñarle a la gente las verdades espirituales de su Reino, por eso predicaba a las multitudes, pero también trataba sus necesidades físicas y emocionales, sanando a las personas que se acercaban a Él, de enfermedades tanto físicas como del alma y del espíritu; del mismo modo, las necesidades básicas del hombre no pasaban desapercibidas, ni eran ajenas para el Maestro, por eso les dice claramente a sus discípulos: “Tengo compasión de la gente, porque ya hace tres días que están conmigo, y no tienen qué comer; y enviarlos en ayunas no quiero, no sea que desmayen en el camino.”

Es interesante ver que sus discípulos, quienes ya habían presenciado el milagro de la multiplicación de los peces y los panes conocido como la alimentación de los cinco mil, cuando escuchan esta declaración de compasión por parte de Jesús responden: “¿De dónde tenemos nosotros tantos panes en el desierto, para saciar a una multitud tan grande?”. Pero Jesús toma esta oportunidad para enseñar nuevamente a sus discípulos acerca de su amor compasivo y bondadoso, y por eso les responde con otra pregunta: “¿Cuántos panes tenéis?” luego de esto los discípulos entregan lo poco que tienen y son testigos nuevamente del milagro de la multiplicación. Hermanos, recordemos siempre la compasión y bondad de nuestro Dios, pues así como es capaz de alimentar a una multitud, también es capaz de saciar con el Pan de vida el alma de un pecador; por eso, compartamos su Palabra y ayudemos con lo que tengamos al necesitado, pues lo uno como lo otro reflejan su amor.    Oración.

«Señor Jesús, ayúdame a ser más como tú, que tu amor me inunde y pueda expresar este amor a los demás por medio de la compasión y la bondad, predicando y practicando. Amén.

martes, 17 de junio de 2025

Ajusta la ruta

 


Ajusta la ruta

El corazón del hombre traza su rumbo, pero sus pasos los dirige el Señor.

(Proverbios 16:9)

Hoy día, muchos usamos la tecnología para actividades habituales de nuestro diario vivir. Una de ellas, bastante utilizada por los motoristas y las personas que buscan localizar alguna dirección, es el GPS. El que usa o ha oído hablar de las aplicaciones de orientación geográfica, sabe que la mayoría de esos navegadores posee una función para actualizar la trayectoria en caso de que haya alguna alteración o algún impedimento para continuar el recorrido.

Todos tenemos proyectos y sueños, pero Dios es quien controla el rumbo que nuestras vidas tomarán. A lo largo de tu trayectoria puede que tu recorrido personal pase por algunas alteraciones repentinas. Por eso, tu mente y tu corazón deben confiar en el Señor, quien ajusta la ruta de tu vida de acuerdo con su voluntad buena, perfecta y agradable. Sigue adelante con fe, bajo la orientación de Jesús, quien es el camino y el compañero fiel que conduce tus pasos en la dirección correcta.

¿Ha sucedido algo inesperado en tu vida? Eso no sorprendió a Dios. Cree que él permanece en control de todas las cosas. ¡Sigue adelante por fe!

Si aún no has puesto tu vida en las manos de Dios, hazlo. Confía que él cuidará de ti, que estará a tu lado todo el día.

Ora cada día entregando tu camino a él.

Busca acercarte más a Dios, conoce su palabra y sus propósitos.

Lee y estudia la Biblia diariamente. Que ella sea la luz que ilumina y orienta tu camino.

Camina junto a otros hermanos en la fe. Mantente en comunión activa en una iglesia.

Oración

Señor mi Dios, te entrego mis caminos en este día. Guía mi vida. Confío en que tienes el control de todo lo que me acontece. A pesar de las situaciones inesperadas, ayúdame a caminar a tu lado, confiando en que me ayudas en todas las dificultades. Que todos mis pasos estén bajo tu cuidado, Señor Jesús, hoy y siempre, amén.

lunes, 16 de junio de 2025

Alaba a Dios.

 


Alaba a Dios.

“Bendice, alma mía, a Jehová, y bendiga todo mi ser su santo nombre. Bendice, alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios. Él es quien perdona todas tus iniquidades, el que sana todas tus dolencias; el que rescata del hoyo tu vida, el que te corona de favores y misericordias; el que sacia de bien tu boca de modo que te rejuvenezcas como el águila”, Salmo 103:1-5

En el antiguo testamento, los términos usados para alabanza son ‘halal’ significado parafraseado de hacer ruido, ‘yada’, relacionado con acciones y gestos corporales que acompañan la alabanza, y ‘zamar’ término relacionado con la música y el canto. En el Nuevo Testamento el término usado es ‘eujaristein’, que literalmente significa dar gracias y ‘eulogein’ que significa bendecir, ambos sugieren una relación íntima con la persona que es objeto de la alabanza.

En la Biblia entera se hallan muchos casos de alabanza que surgen espontáneamente de un corazón agradecido por los favores realizados por Dios. En Salmos 104:31 se declara que la gloria es para Dios y Él se deleita y complace en sus obras, y toda la creación expresa su gozo en alabanza (Job 38:7).

Nosotros fuimos creados para alegrarnos en la obra de Dios (Salmo 90:14-16), y para expresarle a Él todo nuestro gozo por los favores recibidos, incluyendo su perdón por nuestros pecados, porque cuando el reino de Dios llega a nuestro corazón (Es decir Cristo mora en nosotros), es restaurada en nosotros la alegría, la plenitud y a pesar de la dificultades que puedan existir, es quitada la angustia y esto produce un gozo inefable, que deriva en alabanza a Dios (Isaías 9:1-2).

Poder realizar la acción de gracias hacia Dios, expresada en alabanza, aun en medio de los sufrimientos de la vida diaria, santifica todos los aspectos de nuestra vida (1 Corintios 10:30-31) y es muestra de una ofrenda real y verdadera a Dios (Filipenses 2:17), así que empecemos nuestro día alabando a Dios con todo agradecimiento. Oración.

Señor, gracias por la vida eterna que me diste en Cristo, aun en medio de aflicciones te alabaré, tú eres la mayor alegría y en tu Palabra encuentro regocijo. Te alabo oh, mi Dios, por las grandes cosas que haces en mi vida y por lo que harás poderosamente en mí, para tu gloria y honra. Amén.

domingo, 15 de junio de 2025

¿Te ven a ti o ven a Jesús en ti?

 


¿Te ven a ti o ven a Jesús en ti?                                       

Llegamos al final de la semana, Amigo/a, mi anhelo es que hayas sido tan bendecido y edificado como yo. Mientras miramos hacia adelante, quiero dejarte una invitación especial: vive de una manera que honre al Señor en todo lo que hagas.

Su palabra nos dice en Colosenses 1:10 (RVR1960): "Para que andéis como es digno del Señor, agradándole en todo, llevando fruto en toda buena obra, y creciendo en el conocimiento de Dios."

En otras palabras, Pablo nos anima a vivir de acuerdo con nuestra fe. Si digo que sigo a Jesús, entonces mis acciones deben reflejar su carácter.

El término “andar” hace referencia a nuestro estilo de vida: cómo vivimos cada día, cómo tomamos decisiones y cómo nos relacionamos con los demás. Significa buscar Su voluntad en todo lo que hacemos, dejando que nuestra fe guíe cada paso.

Cuando vivimos así, comenzamos a dar frutos. Estos frutos son el resultado visible de una fe viva: buenas obras que nacen del amor de Dios en nosotros. Actuar con amor, generosidad, perdón y paciencia no es un esfuerzo aislado, sino la consecuencia natural de un corazón lleno de Cristo. Cuando Él habita en nosotros, se nota.

Amigo/a, recuerda el propósito de nuestra fe: no solo conocer a Dios, sino vivir de forma que Él se refleje en ti. Esta verdad me ayudó a comprender mejor lo que significa vivir conforme a lo que creo.

Por eso, te animo a rendir tu vida a Dios cada día. Acércate más a Él mediante la oración, la meditación en Su Palabra y la obediencia. Cuanto más lo conoces, más lo amas… y más deseas vivir como Él.

Pido a Dios que tu vida sea instrumento de Su amor para impactar al mundo.

No lo olvides nunca: ¡Eres un Milagro!

sábado, 14 de junio de 2025

Avivando nuestra vida espiritual.

 


Avivando nuestra vida espiritual.

“Entonces vino palabra de Jehová por medio del profeta Hageo, diciendo: ¿Es para vosotros tiempo, para vosotros, de habitar en vuestras casas artesonadas, y esta casa está desierta? Pues así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad bien sobre vuestros caminos. Sembráis mucho, y recogéis poco; coméis, y no os saciáis; bebéis, y no quedáis satisfechos; os vestís, y no os calentáis; y el que trabaja a jornal recibe su jornal en saco roto. Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad sobre vuestros caminos”. Hageo 1:3-7

El libro de Hageo plantea tres problemas comunes a todos los pueblos y yo diría a todas las personas. El primero de ellos es el desinterés. El pueblo de Israel había retornado de su exilio con el propósito de reconstruir el templo de Jerusalén y había comenzado la tarea, pero ante la oposición de los enemigos desistieron y se detuvo la obra, se habían interesado más en reconstruir sus propias casas y entraron en apatía espiritual.

Esto sucede muy a menudo en la vida cristiana, cuando empezamos a crecer espiritualmente y comenzamos a estudiar la Biblia, iniciamos con entusiasmo y perseverancia, pero ante el primer tropiezo, cuando se oponen a que conozcamos del Señor, cuando rechazan el mensaje que damos del evangelio, cuando estorban nuestro crecimiento, vamos perdiendo el interés y preferimos parar para evitar los problemas, detenemos la obra que el Señor ha comenzado en nosotros, eso solo denota inmadurez espiritual.

Lo triste es que nuestra vida se vuelve infructuosa, porque perdemos la perspectiva y nos dedicamos a las cosas del mundo como todos los demás. Los esfuerzos por construir primero lo material y mundano antes que lo espiritual resulta en fracasos que nos hacen tambalear en nuestra fe. Quienes triste y equivocadamente anteponen lo material a Dios salen perdiendo. Debemos entonces reorganizar nuestras prioridades y el primero en la lista es Dios, si queremos una vida bendecida. En Mateo 6:33 se nos da el orden correcto “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas”.

Los tiempos que estamos viviendo demandan actitudes de servicio y compromiso con el Señor, es tiempo de ordenar nuestras prioridades y que nos ocupemos de las cosas de Dios para glorificar su nombre en esta tierra. Hageo 1:8 dice: “Subid al monte, y traed madera, y reedificad la casa; y pondré en ella mi voluntad, y seré glorificado, ha dicho Jehová”. Es tiempo de actuar, el mundo necesita cristianos crecidos espiritualmente que sean testimonio para aquellos que no le conocen, que este 2022 sea el año de tomar con determinación nuestra edificación espiritual. Cuando Dios habla, transmite vida. Esa es la clave de todo despertar espiritual.

Motivémonos con estas palabras de Pedro en 2 Pedro 3:18 “Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén” Oración.

«Amado padre celestial, a través de tu palabra me has advertido que no permita que las preocupaciones, las inquietudes y afanes de este mundo ocupen el primer lugar en mi corazón, de tal manera que invierta mis prioridades y me olvide de ti. Nada saldrá bien si no eres el que dirige cada aspecto de mi vida, porque separado de ti nada puedo hacer. Bienaventurado es el que toma al Señor como su Dios y confía plenamente en lo que Él tiene para su vida, por eso quiero que seas mi prioridad. En el nombre de Jesús. Amén. 

viernes, 13 de junio de 2025

Agradando a Dios nuestro Salvador


 Agradando a Dios nuestro Salvador

«Exhorto, ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad. Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador, el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad. Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su debido tiempo» 1 Timoteo 2:1-6
Que extraordinaria exhortación hace Pablo en su carta a Timoteo y que palabra tan actual para aplicarla nosotros en este tiempo difícil, cuando nuestros gobernantes necesitan de un vallado de oración para que vivan y procedan con compasión, virtud y honestidad, así como también orando unos por otros. Aportar a las soluciones es implorar a Dios cada día, levantar altar para Dios en cada casa, no es colocar imágenes con veladoras, sino disponer nuestros corazones para estar en comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones, unánimes alabando y adorando a Dios, pues de esto se agrada Él.
Dios quiere que todos los hombres vengan al conocimiento de la verdad, pero la verdad solo la encontramos en la Biblia. 2 Timoteo 3:16-17 dice: «Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra» No hay otro camino para conocer la Verdad de Dios, sino las Escrituras.
También Dios quiere que todos los hombres sean salvos, Jesús dijo: «He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo» (Apocalipsis 3:20). Jesucristo toca a tu vida, solo si lo aceptas en tu corazón y crees en Él serás salvo, pues recibes salvación como regalo de Dios. Debes confesar con tu boca que lo aceptas como el único mediador entre Dios y los hombres. Jesús también dijo: «Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios» (Juan 1:12).
Hermano, si Cristo está en tu corazón eres hijo del Gran Rey y lo más importante es que tu nombre estará escrito en el libro de la vida, así un día será abierto aquel libro y te darán la bienvenida al cielo, porque los nombres que allí no estén inscritos serán lanzados al lago de fuego. Oración.
«Amado Dios, elevo a ti mi oración, mi súplica y mi acción de gracias, por los que están en altos cargos directivos o de gobierno, para que la sabiduría y la inteligencia que provienen de tu boca sea sobre ellos, para que actúen en toda piedad y honestidad en estos difíciles momentos y ante todo te conozcan a ti a través de tu Palabra. Gracias Señor. Amen.

jueves, 12 de junio de 2025

Instrumentos de tu Amor

 


Instrumentos de tu Amor

“Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda dolencia. Los nombres de los doce apóstoles son estos: primero Simón, llamado Pedro, y Andrés su hermano; Jacobo hijo de Zebedeo, y Juan su hermano; Felipe, Bartolomé, Tomás, Mateo el publicano, Jacobo hijo de Alfeo, Lebeo, por sobrenombre Tadeo, Simón el cananista, y Judas Iscariote, el que también le entregó.” Mateo 10:1-4

“Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia.” Mateo 10:7-8

Mateo inspirado por el Espíritu Santo, deja registrado en el primero de los evangelios, los nombres de aquellos doce hombres que fueron escogidos por Jesús como sus apóstoles. La palabra apóstol viene del griego apóstolos (ἀπόστολος) que significa: “delegado; específicamente embajador del evangelio; oficialmente comisionado de Cristo”, y a ellos les dio autoridad para echar fuera los demonios, para sanar toda enfermedad y dolencia y aun sobre la muerte pues les dice: “resucitad muertos”; para que de esta manera, como sus delegados, compartieran el evangelio, el mensaje de que el reino de los cielos se había acercado, de que su mesías, su salvador había llegado. A pesar de que inicialmente ellos fueron enviados exclusivamente al pueblo judío, más adelante Jesús les amplió el llamado, para que su predicación fuera hasta lo último de la tierra. Y hoy gracias a la obra de Cristo, y al poder del Espíritu Santo, se sigue expandiendo por todo el mundo este mensaje poderoso del evangelio, el cual es poder de Dios para Salvación, a todo aquel que cree.

Hermanos, hoy en día Jesús sigue llamando a hombres y mujeres comunes y ordinarios para continuar con su obra extraordinaria, que ante el llamado de Cristo no surjan excusas de nuestra parte, pues si miramos aquella lista de los doce apóstoles, ellos no se destacaban por sus virtudes, antes bien, ellos recibieron lo necesario de parte del Señor para cumplir la misión a la que fueron enviados por pura gracia, por eso Jesús les dice: “de gracia recibisteis, dad de gracia” Por lo tanto, de la misma manera como el Señor llamó a los apóstoles, nos ha llamado a nosotros, nos ha capacitado y nos ha enviado, sin merecerlo, solamente por su gracia y amor. Demos nosotros también de gracia, y continuemos llevando este poderoso mensaje: que en Cristo hay perdón de pecados, salvación y vida eterna.    Oración.

«Señor Jesús, de gracia he recibido tu llamado, de gracia he sido capacitado, ayúdame en el poder de tu Santo Espíritu a dar de gracia, úsame como instrumento de tu amor. Amén.

miércoles, 11 de junio de 2025

Llamado de Amor

 


Llamado de Amor

“Pasando Jesús de allí, vio a un hombre llamado Mateo, que estaba sentado al banco de los tributos públicos, y le dijo: Sígueme. Y se levantó y le siguió. Y aconteció que estando él sentado a la mesa en la casa, he aquí que muchos publicanos y pecadores, que habían venido, se sentaron juntamente a la mesa con Jesús y sus discípulos.” Mateo 9:9-10

“Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor. Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies.” Mateo 9:36-38

Mateo, aquel joven recaudador de impuestos, quien para el pueblo judío era considerado como un traidor por trabajar para el imperio Romano, es precisamente a quien en medio de sus labores el Señor Jesús le hace un llamado muy especial diciéndole: “Sígueme”, y en respuesta, deja su puesto levantándose y siguiéndole; después de lo cual ofrece un banquete en su casa, al que asistieron muchos publicanos y pecadores; los publicanos eran personas judías que al igual que Mateo cobraban impuestos a sus propios hermanos, y eran despreciados por ese motivo. Lo maravilloso de este episodio es ver cómo el amor de Jesús salva a un pecador como Mateo, pero no solamente el amor de Cristo impactó en la vida de aquel hombre, sino que seguramente, algunos conocidos de él, que estaban dentro de esos publicanos y pecadores que se sentaron a la mesa junto al Maestro, también fueron impactados por el mensaje que más adelante, en esa reunión, da Jesús cuando le dice a los fariseos: “Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento.” Mateo 9:12-13

Hermanos, Jesús conoce de la necesidad que tenemos de Él, por eso cuando mira a las multitudes, nos dice la escritura, que tuvo compasión de ellas porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor, y por eso pide a sus discípulos orar a Dios para enviar obreros a su mies; que fue precisamente lo que Mateo con su disposición hizo, cuando puso al servicio de Jesús su casa, para que ahí muchos conocieran al Salvador. Así mismo nosotros tenemos ese llamado de amor a compartir el evangelio, así que como Mateo, dejemos aquello que nos separa del Señor, levantémonos, sigámosle y sirvámosle en amor.    Oración.

«Señor Jesús, gracias por hacerme ese llamado de amor para seguirte, gracias porque a pesar de ser un pecador, me has llamado para ser un instrumento de tu amor. Señor, al igual que lo hiciste con Mateo, transfórmame y ayúdame para poner a tu servicio mi vida. Amen.

martes, 10 de junio de 2025

El toque del Amor

 


El toque del Amor

“Cuando descendió Jesús del monte, le seguía mucha gente. Y he aquí vino un leproso y se postró ante él, diciendo: Señor, si quieres, puedes limpiarme. Jesús extendió la mano y le tocó, diciendo: Quiero; sé limpio. Y al instante su lepra desapareció.” Mateo 8:1-3

“Entonces Jesús dijo al centurión: Ve, y como creíste, te sea hecho. Y su criado fue sanado en aquella misma hora.” Mateo 8:13

“Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía.” Mateo 8:15

Mateo nos menciona cómo, después de que Jesús bajó del monte, un hombre con lepra se postró delante de Él, y le dijo: “Señor, si quieres, puedes limpiarme”, pero lo más sorprendente es la declaración de Jesús y su acto de amor, “Jesús extendió la mano y le tocó, diciendo: Quiero; sé limpio”, ese acto sencillo pero poderoso de tocar a aquel hombre leproso nos deja ver cómo Jesús pone en práctica el amor; lo mismo ocurrió con el criado del centurión, el cual no recibió un toque físico sino el toque sanador del amor de Dios, de igual manera ocurrió con la suegra de Pedro, quien pudo experimentar la ternura del toque sanador de Jesús.

Hermanos, de estas tres personas que tuvieron su encuentro con Jesús podemos aprender: 1) que al igual que aquel hombre leproso, es necesario reconocer a Jesús como Dios, y llegar a él en esa maravillosa actitud de adoración, postrándonos ante Él, reconociendo que todo lo puede hacer, pero pidiéndole con total humildad que se haga de acuerdo a su voluntad, es decir, si él así lo quiere; 2) que para acercarnos a Jesús, necesitamos fe, pues como dice la escritura, sin fe es imposible agradar a Dios; y 3) que en agradecimiento a lo que Jesús ha hecho en nuestras vidas debemos ser intencionales en servir con amor.

Además, al igual que Jesús, cada uno de nosotros debe ser sensible ante las necesidades de nuestros semejantes, pues muchos como aquel hombre leproso, están marginados por causa del pecado; otros están como el centurión, sufriendo porque algún ser querido está padeciendo alguna enfermedad; y tal vez unos cuantos más se encuentren postrados en cama sin poder pararse como la suegra de Pedro; por eso al compartir del evangelio también extendamos nuestras manos permitiendo que Jesús siga manifestando ese toque de amor por medio de nosotros.    Oración.

«Señor Jesús, hoy anhelo un toque de tu amor, me rindo ante ti en adoración, lléname con tu Santo Espíritu y permíteme ser ese instrumento para que tú sigas llevando ese toque de amor al perdido y necesitado. Amen.

lunes, 9 de junio de 2025

La regla de oro

 


La regla de oro

“Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas.” Mateo 7:12

“Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca.” Mateo 7:24

“Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.” Mateo 7:28-29

El pasaje de Mateo 7:12 es conocido como la regla de oro, y nos enseña que así como queremos ser tratados debemos tratar a los demás, es decir que nuestro trato con las demás personas debería ser con el mismo amor y respeto con el cual nos gustaría que nos trataran.

Es maravilloso ver cómo Jesús relaciona en el sermón del monte este principio básico, con el cumplimiento de la ley y los profetas, dándonos a entender la profundidad de la ley, que si bien en nuestras fuerzas es imposible de cumplir en su totalidad, gracias a la obra de Cristo, ahora esa ley se convierte en espíritu y vida para el creyente, como dice Juan 6:63b “las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida”, y por eso ahora en Cristo, y gracias a que su amor ha sido derramado en nuestros corazones, podemos tratar a los demás con el mismo amor que nos gustaría recibir en el trato de nuestros semejantes para con nosotros, cumpliendo así con esta regla de oro.

Por eso hermanos a la hora de actuar, tengamos en cuenta las palabras de Jesús en Mateo 7:24, para oírlas y hacerlas, pues así con la ayuda del Espíritu Santo podremos tratar a las personas con el amor de Dios, y entonces podremos edificar relaciones sanas y fuertes sobre la Roca, teniendo amistades verdaderas, matrimonios estables y familias sólidas.

Hermanos al igual que Jesús, aprendamos a tener vidas coherentes, pues de Él se admiraban por que enseñaba con autoridad como declara Mateo 7:28-29, y esta autoridad se la daba su integridad, pues lo que enseñaba era lo que él mismo practicaba. Así que como seguidores de Cristo que predicamos su amor, apliquemos en nuestro diario vivir la regla de oro, amando a los demás de la misma manera como Cristo nos ha amado a nosotros.   Oración.

«Espíritu Santo, ayúdame para que tu amor se manifieste en el trato diario que tengo con mis semejantes, que pueda amarlos como Jesús me ha amado y me ha enseñado a hacerlo, que tu amor sea brotando de mi vida como ríos de agua viva. Amén.

domingo, 8 de junio de 2025

Verdadero tesoro

 


Verdadero tesoro

«Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros.” 2 Corintios 4:7

“Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.” Mateo 13:44

“Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra.” Éxodo 19:5

Hacer tesoros en el cielo, como lo veíamos en el devocional de ayer, hace referencia a anhelar lo mismo que Dios anhela, a desear hacer su voluntad, a que sus tesoros sean los nuestros, en ese sentido cuando miramos a Cristo, reconociendo como lo manifiesta 2 Corintios 4:7, que Cristo es el Tesoro, y al ver su extraordinario, eterno e incomparable amor por la humanidad, un amor tan grande que lo llevó a la cruz, para dar su vida, como pago por nuestros pecados, y así mostrarnos cómo cada uno de nosotros los creyentes puede ser ese vaso de barro donde él habite, debe llevarnos a desear que muchos puedan tener este gran tesoro en su corazón.

Por eso es que para nosotros el hacer tesoros en el cielo debe llevarnos a compartir de Cristo, pues cuando una persona recibe a Cristo en su corazón está recibiendo el más grande tesoro en su vida, y a su vez nosotros quienes le compartimos estamos haciendo tesoros en el cielo, pues es un alma más que Jesucristo salva, una persona más que recibe el reino de los cielos, un pecador más que se arrepiente.

Qué maravilloso que nuestro anhelo sea poder ver en el cielo a nuestro cónyuge, a nuestros hijos, a nuestros padres, a nuestros hermanos, a nuestros familiares y amigos y aun a aquellos que son desconocidos, pues esos son los tesoros más valiosos que podremos tener, valiosos en Cristo Jesús.

En este sentido podemos ver, como lo reflejan los pasajes de Mateo 13:44 y Éxodo 19:5, que para el Señor un tesoro importante es que los hombres puedan hallar el reino de los cielos, que como dice Romanos 14:17 es justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo. Pero más aún que Dios pueda tener a su pueblo, que es su especial tesoro junto a Él, gracias a Cristo.    Oración.

«Señor Jesús, tú eres el más grande tesoro en mi vida, contigo lo tengo todo y sin ti nada soy, que tu Santo Espíritu me lleve a compartir este gran tesoro con la humanidad. Amén.

sábado, 7 de junio de 2025

Tesoros Celestiales

 


Tesoros Celestiales

«No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.” Mateo 6:19-21

Esta enseñanza de Jesús registrada en Mateo 6:19-21, apunta directamente a los deseos de nuestro corazón, a lo que para nosotros es realmente importante, aquello de valor que representa un tesoro para nuestras vidas, y en ese sentido el creador de todo nos dice enfáticamente que no nos hagamos tesoros aquí en la tierra sino en el cielo, pues donde coloquemos nuestros afectos, ahí estará nuestro corazón.

Y es realmente importante que lo que sea prioridad para nosotros los creyentes sea lo mismo que es para Dios, es decir que nuestros tesoros sean los mismos de Dios, y en ese sentido Jesús nos enseña que hay una manera incorrecta y otra correcta de ofrendar, de orar y de ayunar, así, si lo hacemos siguiendo nuestros deseos egoístas, seguramente lo haremos de manera incorrecta, pero si lo hacemos a la manera de Dios como se nos enseña en Mateo 6:1-18, buscando los tesoros celestiales, entonces recibiremos recompensa de parte de Dios.

Por eso es que Jesús enfatiza que nuestro ojo debe ser bueno, refiriéndose a la lámpara del cuerpo, es decir a esa visión que debe llevarnos a desear las cosas espirituales y a fijar nuestra mirada en ellas, para que nuestro corazón anhele lo espiritual por encima de lo terrenal (Mateo 6:22-23 y Colosenses 3:2), así podremos aún manejar de manera equilibrada nuestras finanzas, sin tener amor por el dinero, pues como dice su Palabra no podemos servir a dos señores (Mateo 6:24).

Por tal razón, pidamos al Señor obediencia para hacer tesoros celestiales, con lo cual aún el afán y la ansiedad no podrán afectarnos, pues tanto el afán como la ansiedad son producto de tener la mira en las necesidades terrenales, de las cuales, nuestro Padre Dios tiene conocimiento y es poderoso para suplirlas conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús (Mateo 6:25-34 y Filipenses 4:19).   Oración.

«Padre bueno, gracias porque sé que tú suples todas mis necesidades, por eso te pido me ayudes por medio de tu Santo Espíritu a poner mi mirada en las cosas realmente importantes, aquellas que están de acuerdo a tu voluntad, para que con valentía y amor pueda trabajar para hacer tesoros celestiales. Amén.

viernes, 6 de junio de 2025

El Amor cumple la ley

 


El Amor cumple la ley

«No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir. Porque de cierto os digo que hasta que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la ley, hasta que todo se haya cumplido. De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos; mas cualquiera que los haga y los enseñe, este será llamado grande en el reino de los cielos.” Mateo 5:17-19

El Señor Jesús en medio de sus enseñanzas de lo que conocemos como el sermón del monte deja bien claro que Él no vino a invalidar la ley o los profetas, sino antes bien vino para cumplirla, y hace una declaración sorprendente que quedó registrada en Mateo 5:19 dejándonos claro que los mandamientos de Dios son para vivirlos.

En su sermón, Jesús nos enseña de las bienaventuranzas para desarrollar grandes virtudes en nuestras vidas y nos pide como sus seguidores ser la sal y la luz del mundo, nos enseña que más allá de no matar, no adulterar, no jurar en vano, debemos aprender a no enojarnos contra nuestro hermano, y si lo hacemos, a reconciliarnos, a no tener malos deseos en nuestro corazón, a que nuestro sí sea sí y nuestro no sea no, a que no nos venguemos, a amar a nuestros enemigos, a no divorciarnos solamente porque no nos entendemos.

La solicitud de Jesús parecería una tarea complicada, pero en realidad no es así, pues como creyentes hemos sido hechos nuevos como declara 2 Corintios 5:17, se nos ha dado su Santo Espíritu, quien ha derramado en nuestros corazones el amor de Dios como dice Romanos 5:5 y él mismo es quien por medio de la Comunión nos ayuda a dar el fruto del Espíritu que encontramos en Gálatas 5:22-23, para que podamos por medio del amor cumplir la ley, como dice Romanos 13:10 “El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor.”

Así que hermanos, “No debamos a nadie nada, sino el amarnos unos a otros; porque el que ama al prójimo, ha cumplido la ley. Porque: No adulterarás, no matarás, no hurtarás, no dirás falso testimonio, no codiciarás, y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.” Romanos 13:8-9      Oración.

«Espíritu Santo, ayúdame a permanecer en comunión contigo diariamente, llévame a esa intimidad, y produce en mí, tu fruto, pues mi deseo es dejar vivir a Cristo a través de mí, y por medio de tu amor ser más como Él. Gracias porque ahora puedo amar con tu amor y así vivir de acuerdo a tus mandamientos, que no son gravosos y son santos y puros. Amén.

jueves, 5 de junio de 2025

Instrumentos de Amor

 


Instrumentos de Amor

«Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo. Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.” Mateo 4:1-2

“Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás. El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían.» Mateo 4:10-11

“Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.” Mateo 4:17

Mateo inspirado por el Espíritu Santo, nos muestra claramente que Jesús venció toda tentación, y nos deja ver que la Palabra de Dios fue fundamental para resistir y combatir los ataques del maligno, (Mateo 4: 4,7,10), pero también nos deja ver la importancia que tiene la comunión con Dios, pues Mateo 4:2 hace énfasis que antes de empezar la tentación, Jesús se encontraba en ayuno. Por eso para nosotros los creyentes es maravilloso saber que hoy podemos contar con la Palabra de Dios como arma para combatir la tentación y que gracias a Cristo podemos tener comunión con el Espíritu Santo, quien nos capacita para usar adecuadamente la Palabra de verdad y así resistir al maligno.

Saber que nuestro Señor salió victorioso de esa prueba en el desierto, y que los mismos ángeles de Dios bajaron del cielo a servirle como dice Mateo 4:11b, debe llevarnos a una comprensión más profunda de aquel a quien servimos, pues Él es Santo, Santo, Santo y así como aquellos ángeles le sirvieron, nosotros los creyentes debemos hacer lo mismo, servirle y seguir proclamando como lo hizo Jesús: “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado” Mateo 4:17.

Mateo al mostrarnos las primeras palabras con las que Jesús inicia su ministerio utiliza la palabra griega metanoéo al referirse a lo que se traduce como arrepentimiento, y que significa un cambio de pensamiento, indicándonos la importancia de renovar nuestra manera de pensar para poder ver las cosas a la manera de Dios y no a la nuestra, y poder comprobar la buena voluntad de Dios que es agradable y perfecta (Romanos 12:2). Hermanos que nuestra manera de pensar sea renovada, y al arrepentirnos podamos ver, al igual que Mateo, esos milagros, señales y prodigios que Cristo sigue haciendo por medio de todo aquel que rinde su vida a Él en servicio y amor.   Oración.

«Espíritu Santo, llévame a tener un cambio de pensamiento, lléname de tu Palabra y permíteme ser un instrumento de tu amor, sirviéndote a ti y a los demás en amor. Amén.

miércoles, 4 de junio de 2025

Cuerdas de Amor

 


Cuerdas de Amor

«En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha  acercado. Mateo 3:1-2

“Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él. Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.” Mateo 3:16-17

Dios nos busca de diferentes maneras, nos atrae hacia Él con cuerdas de amor como lo dice Oseas 11:4, Mateo fue alcanzado por el amor de Dios, y recibió el llamado directamente de Jesús el Salvador, pero antes de esto seguramente como muchos otros escuchó la predicación de Juan el Bautista, y es por eso que registra en su evangelio el mensaje central que él predicaba: “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado” Mateo 3:2

Y la palabra arrepentimiento usada por Mateo, viene del griego metanoéo que significa pensar diferente, es decir reconsiderar, lo cual debe llevarnos claramente a entender que debido a que el reino de los cielos se ha acercado debemos tener un cambio de pensamiento.

Para una persona en una posición social como la de Mateo, por encima de la mayoría de sus contemporáneos, cambiar de forma de pensar era muy importante, pues por su oficio, seguramente muchas de las tradiciones romanas se habrían impregnado en él, a tal punto de realizar un trabajo que para su pueblo era considerado una traición.

Lo registrado en el capítulo 3 del evangelio de Mateo debe llevarnos a meditar en la importancia que tiene el trabajo que cada miembro desarrolla en el cuerpo de Cristo, la iglesia, pues lo que le ocurrió a Mateo y que como testimonio es contado por él mismo, cuando declara las Palabras dadas por el Padre a Jesús: “Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia”, y la predicación del arrepentimiento, finalmente tuvieron su cosecha cuando aquel recaudador de impuestos lo dejo todo por seguir a Cristo.

Por esto hermanos sigamos el consejo del apóstol Pablo de predicar la Palabra en todo momento (2 Timoteo 4:2), pues la Palabra de Dios nunca vuelve vacía y es capaz de transformar a hombres pecadores como lo eran Mateo y cada uno de nosotros.    Oración

«Padre, gracias porque siempre estás buscando la manera de atraerme hacia ti, y has usado las cuerdas de amor de tu Palabra, ayúdame a hacer lo mismo al compartir de ti. Amén.

martes, 3 de junio de 2025

Protección de Amor

 


Protección de Amor

«Cuando Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, vinieron del oriente a Jerusalén unos magos, diciendo: ¿Dónde está el rey de los judíos, que ha nacido? Porque su estrella hemos visto en el oriente, y venimos a adorarle.» Mateo 2:1-2

“Después que partieron ellos, he aquí un ángel del Señor apareció en sueños a José y dijo: Levántate y toma al niño y a su madre, y huye a Egipto, y permanece allá hasta que yo te diga; porque acontecerá que Herodes buscará al niño para matarlo.” Mateo 2:13

El nacimiento de Jesús, el Salvador de la humanidad, no pasó desapercibido para aquellos sabios que reconocieron las señales celestiales y fueron en busca del único Dios verdadero, que venía a este mundo como un indefenso bebe, para conocerle y adorarle (Mateo 2:1-2).

Mateo quien años más tarde tendría su encuentro personal con Jesús, dejó registrado en el evangelio que lleva su nombre este hecho, esta visita, pues así como él, un pecador, recaudador de impuestos, fue visitado por Cristo, y así como Dios se manifestó a personas de tierras lejanas, como aquellos sabios de oriente, también hoy visita y se manifiesta a los hombres por medio de personas como tú y como yo, que se convierten en esa estrella que al compartir el evangelio, las buenas nuevas de salvación, llevamos o acercamos a las personas a Jesucristo.

Y ese encuentro con Cristo es tan maravilloso que debe llevarnos, al igual que paso con Mateo, a tener cambios profundos en nuestra vida, por ejemplo, Mateo quien antes de depositar su fe en Jesucristo, trabajaba para el imperio romano cobrando impuestos a sus propios hermanos judíos, tuvo un cambio tan radical, que valientemente se atrevió a dejar registrado el terrible suceso del asesinato de niños inocentes en Mateo 2:16-18, lo cual debe llevarnos a reflexionar si nosotros como creyentes estamos dispuestos también a exhibir públicamente prácticas que van en contra de niños inocentes como lo son el aborto, el abuso de menores, las ideologías de género, y levantarnos realizando ajustes en nuestra manera de pensar para precisamente cuidar de ellos.

Hermanos la mejor forma de cuidar de los niños es tener comunión con el Espíritu Santo, para poder ser sensibles a su voz y obedecerle, permaneciendo así en su protección de amor, esto fue lo que hizo José, y Dios lo guío para poner a salvo la vida de Jesús (Mateo 2:13).    Oración.

«Padre Dios, gracias por tu protección de amor, gracias porque al creer en tu amado Hijo me has acogido en tu regazo, brindándome toda la protección que necesito, permíteme ser sensible a tu Espíritu para llevar a otros a esa seguridad que solamente brindas tú. Amén.

lunes, 2 de junio de 2025

Conexión de Amor

 


Conexión de Amor

«Libro de la genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham.» Mateo 1:1

“El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo.” Mateo 1:18

Mateo, quien antes de seguir a Cristo era recaudador de impuestos, y por tal razón era considerado traidor entre los judíos, pudo experimentar el rechazo y el aislamiento social, pero en el momento en que Jesús le hace el llamado para que lo siga, le da la oportunidad para tener una conexión de amor divina, capaz de sanar y restaurar cada herida causada por sus decisiones, o las de otros en su pasado, pues quien lo llamaba es el mismo Dios de amor encarnado.

Y es maravilloso observar cómo Mateo es transformado al creer en Jesucristo como su Salvador, y cómo al empezar a escribir el evangelio que lleva su nombre, inspirado por el Espíritu Santo, inicia con la genealogía de Jesucristo, mostrándonos esa humanidad de Jesús, quien se identifica plenamente con nuestra humanidad, para que en Él, nosotros podamos encontrar precisamente lo que halló aquel joven recaudador de impuestos, un Dios de amor, cercano, que nos comprende, porque para Él, nuestros pecados, nuestra debilidad y nuestros errores no le sorprenden.

Por eso es increíble ver que en la propia genealogía de Cristo, estén hombres y mujeres tan imperfectos, llenos de miedos, temores, celos, pasiones, pecados, algunos como aquellas mujeres que se mencionan especialmente; rechazados, olvidados, con vidas desordenadas; y ver que Mateo, precisamente un hombre que bien se puede identificar con ellos, empiece su evangelio mencionándolos, nos debe llevar a reconocer nuestra condición humana y pecadora, pero solamente para darnos cuenta que aquel de quien Mateo menciona ese nacimiento por obra y gracia del Espíritu Santo, es también quien puede darnos esa conexión de amor que tanto necesitamos, para que nuestras vidas sean transformadas.

Hermanos que al igual que Mateo, hoy decidamos seguir a Cristo sin vacilación, pues Él nos dará al igual que lo hizo con aquel joven, una nueva vida, mucho mejor que la que podamos imaginar.  Oración.

«Señor Jesucristo, gracias por buscarme, revelarte a mi vida, perdonarme y por restaurarme con tu gran amor, gracias porque tú que empezaste la buena obra en mí, la terminarás, y me lo demuestras a diario, volviendo una y otra vez a recordarme tu llamamiento, gracias por hacerme ese llamado, ayúdame a seguirte, Amén.

domingo, 1 de junio de 2025

No hay nadie como tú Jesús


No hay nadie como tú Jesús

 “Así que, si alguno se limpia de estas cosas, será instrumento para honra, santificado, útil al Señor, y dispuesto para toda buena obra”.2 Timoteo 2:21

“Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará. Si permaneciere la obra de alguno que sobreedificó, recibirá recompensa. Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque, así como por fuego”.1 Corintios 3:11-15

El Señor nos llama no solo a una preparación doctrinal sino espiritual, no solo a adquirir conocimiento, sino a ser transformados por él; porque conocer las Escrituras es vital, pero vivirlas es lo que marca la diferencia. Santiago 1:22 dice: “Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos”.

La obediencia es el sello de la preparación auténtica, no se manifiesta en palabras sino en decisiones, no se evidencia en discursos sino en carácter. La oración, la meditación en la Palabra y el ayuno no son prácticas opcionales para los tiempos proféticos, sino disciplinas esenciales para tener claridad espiritual para discernirlos.

Esa disposición es lo que se requiere para estar listos, limpios y disponibles, siendo fieles en lo pequeño porque será la medida para sostenernos en lo grande, (Lucas 16:10). La gloria de Cristo viene no para engrandecer a hombres, sino para engrandecerlo a Él. Solo los que nos rendimos ante Él, seremos canales de esa gloria como dice Juan 3:30 “Es necesario que él crezca, pero que yo mengüe”.

Esa actitud es la esencia para no ser vistos, sino ser útiles, permitir que sea el Espíritu de Dios quien gobierne cada área de nuestra vida, que crezca en nosotros, mientras nosotros menguamos. Es la experiencia de una relación constante con Él, solo así desarrollaremos sensibilidad espiritual. Romanos 8:14 dice: “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios”. La guía no es generalizada, es personalizada.

Solo los que estén firmes en su identidad en Cristo permanecerán, el pueblo de Dios debe ser una generación que camina en santidad no por obligación sino como una respuesta de amor. La santidad no es un adorno debe ser una marca, un testimonio de vida, que hará que otros anhelen conocer a Jesús.

Nuestra autoridad espiritual será reconocida no por títulos sino por los frutos como dice Mateo 7:20 “Así que, por sus frutos los conoceréis”. Los frutos se cultivan con paciencia, fidelidad y obediencia. Es el tiempo para dejar que el Espíritu Santo forme en cada creyente la imagen de Cristo. Seamos templos santos para Él. La autoridad será probada, por eso preparémonos no por miedo sino por propósito, no por presión sino por revelación, no por emoción sino por visión; porque el Señor no está buscando espectadores sino colaboradores, no está llamando a religiosos sino a hijos.

Dios está levantando un pueblo preparado, no perfecto, pero si dispuesto con un corazón rendido, con un espíritu firme, es el tiempo para consagrarse, afirmarse. La iglesia en Corinto estaba construida con «madera, heno y hojarasca», con miembros que eran inmaduros, insensibles a los demás, y receptivos a las doctrinas erróneas, por eso tuvieron tantos problemas. Debemos ser edificados en Cristo. Hagámonos esta pregunta ¿Puede nuestro carácter cristiano pasar la prueba?   Oración.

«Señor Jesucristo, el fundamento de mi vida eres tú, eres mi modelo espiritual, por eso anhelo ser edificado en ti, no sobre alguna persona o principio, quiero ser un instrumento para honra, santificado y útil para ti. Lléname de tu Santo Espíritu. Sé que pondrás a prueba el fundamento sobre el cual edifico mi vida, porque la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada, quiero permanecer siempre en ti. Mi recompensa será tu eternidad y poder disfrutar de tu infinito amor, amén.