sábado, 8 de mayo de 2021

El perfil de un vencedor

 


El perfil de un vencedor

“Más a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús, y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento”. 2 corintios 2:14

“Más gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo”. 1 corintios 15:57

Los creyentes no demostramos un falso optimismo, nuestro espíritu vencedor es gracias a la victoria genuina que Jesucristo realizó sobre el pecado, y porque Él invadió el dominio de la muerte y le robó su aguijón. Podemos apropiarnos de ese triunfo logrado con su sacrificio y atestiguar a través de nuestra vida, cuando decimos: “Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte”. Romanos 8:2

Sabemos que la consumación final de su victoria sobre la muerte será en su Segunda Venida, cuando en los eventos futuros El Señor lleve a cabo su propósito final en esta tierra, sucesos que nosotros no podremos evitar porque son parte del plan de Dios, lo que podemos hacer es vivir firmes en la doctrina y activos en su obra, de tal manera que permanezcamos en Cristo. Estamos seguros que la voluntad de Dios para cada uno de nosotros será completada hasta el fin como dice Filipenses 1:6 “estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo”.

Por eso no debemos rendirnos, ni dejar de creer en lo que Dios hará cuando veamos que las cosas no salen como esperábamos. La clave es apropiarnos de nuestro espíritu vencedor y enfrentar lo que está delante de nosotros, porque un triunfador en Cristo se niega a cansarse, continúa haciendo el bien, reconoce cuando es el tiempo, está comprometido en cosechar y no se deja desanimar por las circunstancias. (Gálatas 6:9)

Recordemos que el Gran Yo soy vive en nosotros y es el que nos da el poder para vencer. Cuando Él ocupe siempre el primer lugar en nuestra vida, desarrollaremos un carácter como el suyo, entendiendo que tiene todo bajo su soberanía y control. Llenémonos de su sabiduría, vivamos vidas bendecidas que influencien a aquellos que nos ven y nos escuchan. Caminemos en victoria porque Jesús ya ha vencido al mundo por nosotros.   Oración.

«Señor mi Dios, mi gran Yo Soy, hoy quiero vivir una vida bendecida, la buena vida que has planeado para mí, ayúdame a tener un espíritu vencedor, entendiendo que ya me entregaste tu victoria en la cruz sobre el pecado y la muerte. Quiero caminar contigo, fijando siempre mis ojos en ti para no cansarme ni rendirme porque ya venciste. Amén.  Difundiendo el mensaje de Jesucristo.

¡Hasta lo último de la tierra! Usa tus redes sociales para ese propósito.