sábado, 2 de noviembre de 2024

Caminar de la mano de Dios

 


Caminar de la mano de Dios

“Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios.” Génesis 5:24

Para caminar con Dios, estamos llamados a ser hombres de fe como Enoc: “Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a Dios”, (Hebreos 11:5). Esta es la clave “por la fe”, Enoc le creyó a Dios, confió plenamente y en su diario caminar tuvo presente al Señor. Por esto el escritor de Hebreos inspirado por el Espíritu Santo, escribe acerca de diferentes hombres que por la fe hicieron grandes cosas y soportaron pruebas tremendas; menciona a Enoc como uno de aquellos que al tener la certeza de lo que se espera y la convicción de lo que no se ve, pudo agradar y ser partícipe de la bendición que Dios da a los que creen, conforme está escrito en la palabra de Dios que la fe viene por el oír y el oír por la palabra de Dios (Hebreos 11:1, Romanos 10:17).

Nosotros también si caminamos con Dios, estando atentos a lo que dice su palabra para vivirla diariamente, sin dudar y siendo constantes en esto, lograremos cosechar una relación de amor que nos llevará a que su paz nos eleve por encima de todos los dolores y problemas de la vida. No a evadir la realidad, sino a enfrentarla con la actitud, la verdad y poder de la fe.   Oración.

«Padre, quiero caminar contigo y sé que el único camino es Cristo, llevar mi vida a la cruz para morir y resucitar con él, para que así en mi diario caminar pueda ir de tu mano, sabiendo que tienes el control de mi vida y tu Palabra guía mis pasos. En el nombre de Jesús. Amén.