miércoles, 6 de noviembre de 2024

Ausencia de luz. Parte 2

 


Ausencia de luz. Parte 2

“Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas. Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas.” Juan 3:19-20

“porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,”, 2 Corintios 10:4-5

Como terminamos reflexionando en el devocional de ayer, ¿a qué nos debe llevar este conocimiento de lo que significa el mal?. A dos cosas esencialmente: a permitir que la luz de Cristo resplandezca en nuestra vida, que en esencia es reflejar su carácter; para colocar en acción el bien. Y segundo, a usar las armas espirituales de luz para contrarrestar la influencia del mal y no permitir que se dañe lo bueno.

Profundicemos en estas dos ideas bíblicas:

Colocar en acción la luz, colocarnos en alto significa ir y predicar el evangelio, anunciar a Cristo es no escondernos debajo de la mesa (Mateo 5:14-16), sino hacer lo que dice 1 Tesalonicenses 5:6: “Por tanto, no durmamos, como los demás, sino velemos y seamos sobrios”, ya que en pocas palabras, el adormecimiento de los que pueden dar luz, es la causa de que el mal invada la tierra, las familias y gane terreno en muchas áreas.

Usar armas espirituales, pues si el mal también es una influencia maligna, no podemos quedarnos quietos cuando algo malo ocurre o está por ocurrir, detrás de muchas situaciones e incluso de hombres, hay influencias de maldad que los empujan, así que debemos luchar espiritualmente en oración para detener la influencia del mal como dice 2 Corintios 10:4-5.

Hermanos es tiempo de despertar y ser diligentes para que reflejando el carácter de Cristo por el poder de su Espíritu, llevemos su amor y su Palabra a todo el mundo, pues es tiempo de gracia; llegará el día que los creyentes seamos quitados de la tierra, entonces no habrá quien detenga el mal y la oscuridad avanzará hasta que Cristo regrese y venga a juzgar con justicia a los que rechazaron su luz. (2 Tesalonicenses 2:7, Apocalipsis 19:11-15)    Oración.

«Padre, me has dado tu Palabra y tu Espíritu para aprender tus principios y reflejar el carácter de Cristo, de esta manera llevar el verdadero evangelio a todos los que tienen hambre de ti, entonces el mal no avance en mi familia y en mi nación, no permitas que los afanes de la vida enfríen y oculten la luz de Cristo que debe brillar en mi vida  amen.