Cristo nos muestra lo que es vivir con propósito
“Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo
aún pecadores, Cristo murió por nosotros.” Romanos 5:8
“Y él se apartó de ellos a distancia como de un tiro de
piedra; y puesto de rodillas oró, diciendo: Padre, si quieres, pasa de mí esta
copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya. Y se le apareció un ángel del
cielo para fortalecerle. Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su
sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra.” Lucas 22:41-44
Cuando miramos el nacimiento, obra y muerte de nuestro Señor
Jesucristo podemos ver el verdadero significado de vivir una vida con
propósito, la vida de Jesús fue una vida significativa pues desde su nacimiento
hasta su crucifixión, todo tuvo que ver con la manifestación del amor de Dios
al ejecutar el plan de salvación para la humanidad. (Romanos 5:8)
Permanecer en una relación personal de Amor con su Padre
Celestial le permitió a Jesús mantenerse firme hasta el final para poder así
cumplir con su propósito (Lucas 22:41-44), por eso con toda convicción durante
su ministerio lo vemos decir: “Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a
salvar lo que se había perdido”. (Lucas 19:10) y también lo vemos declarar:
“Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del
que me envió.” (Juan 6:38)
Cuando se vive una vida con propósito se deja huella, Cristo
dejó una huella para la eternidad, pues su vida de propósito lo llevó a la cruz
por amor, para que el destino de todo aquel que deposite su fe en Él cambie
para siempre, obteniendo vida eterna. Lo anterior lo pudo experimentar en carne
propia el apóstol Pablo, por eso manifiesta en 1 Timoteo 1:15 “Palabra fiel y
digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a
los pecadores, de los cuales yo soy el primero.” Y escribe en Gálatas 2:20 “Con
Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y
lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me
amó y se entregó a sí mismo por mí.”
Hermanos, sigamos el ejemplo de Jesús y cultivemos una
relación personal de amor con Dios, para así hacer su voluntad y poder entonces
tener vidas con propósito. Oración
«Espíritu Santo llévame a cultivar una relación personal de
amor con Dios, pues quiero seguir el ejemplo de Jesús, para así poder vivir una
vida con propósito y dejar una huella de amor. Amén.