FRATERNIDAD
Señor alienta en mi corazón el crecimiento del amor fraterno
hacia mis hermanos, guíame a tener un mismo sentir con ellos y a asistirlos en
sus necesidades. Amén.
Amaos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a
honra, prefiriendo los unos a los otros.", Romanos 12:10.
Pero acerca del amor fraternal no tenéis necesidad de que os
escriba, porque vosotros mismos habéis aprendido de Dios que os améis unos a
otros. 1 Tesalonicenses 4:9-10
Fraternidad se refiere a unión, respeto mutuo y
acompañamiento, con un gran sentido de compartir algo en común.
Compartimos los creyentes en Cristo, un mismo sentir, un
mismo Espíritu, una misma esperanza, una misma fe. Aquello que nos une, es
decir Cristo, nos hace un solo cuerpo.
Por eso debemos asistir con diligencia al hermano que está en
nuestra congregación, aquel que está necesitado, ya sea espiritualmente o en
bienes materiales; no se puede decir “Dios te bendiga voy a orar por ti y no
brindarle una ayuda material sabiendo que podemos hacerlo y que el otro lo
requiere (Santiago 2:15-16). En Juan 1:3-17 el Señor es contundente al
enseñarnos a tener amor unos con otros: “Pero el que tiene bienes de este mundo
y ve que su hermano padece necesidad y le cierra su corazón, ¿cómo morará el
amor de Dios en él?”.
Así que si tenemos la posibilidad de dar a quien necesita,
sin falta demos con todo amor fraternal; al que está decaído, demos ánimo con
toda oración y Palabra, recordando lo que Dios ha hecho por él en la cruz; al
que pasa por gran necesidad, sin avergonzarlo, demos toda la ayuda económica
según las posibilidades que tengamos. Ocupémonos unos de otros, en esto
conocerán que nos amamos y que el amor de Dios mora en nosotros. Oración.
Señor alienta en mi corazón el crecimiento del amor fraterno hacia mis
hermanos, guíame a tener un mismo sentir con ellos y a asistirlos en sus
necesidades. Amén. Difundiendo el
mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la tierra! Usa tus redes sociales para
ese propósito.
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